Yo creo que la mejor noticia de las elecciones del día 18 sería que los resultados dieran lugar a un nuevo Gobierno de coalición de las fuerzas progresistas, nacionalistas y de izquierdas, que desplace al PP a la oposición, tras largos años de una gestión muy perjudicial, a mi juicio, para la mayoría de los gallegos y, sobre todo, de las gallegas.

A esta altura de la campaña he de tener en cuenta las posibilidades que existen para alcanzar este objetivo y cómo mi voto, en mi provincia, puede ayudar a ello partiendo de mis convicciones, mis posiciones políticas, mis intereses personales y los de mi gente, de mis amigos y de la clase o sector social al que pertenezco. Sabiendo también que todos los votos son útiles. No hay voto inútil o perdido. El llamado “voto útil” es una añagaza, un artificio para la manipulación. Otra cosa es que los votos tengan distintas, diversas y hasta contradictorias utilidades, pero de eso precisamente se trata en democracia.

La alianza mejor y posible, según mi criterio, sería la de BNG, PSdeG-PSOE y SUMAR, citados por orden de las posibilidades que cada formación tiene de alcanzar más o menos número de votos en el conjunto de Galicia.

En las provincias de A Coruña y Pontevedra, según los analistas, se disputan un diputado, en cada una, entre el PP y SUMAR, lo que quiere decir que, votando a SUMAR en estas provincias, nada se resta al BNG o al PSdeG-PSOE. Al contrario, se facilitaría la pérdida de la mayoría absoluta del PP, lo que haría posible que estos dos partidos puedan coaligarse para gobernar.

SUMAR, por otra parte, es la formación política que más se acerca a mis posiciones y que logró articular una alianza no total, lamentablemente, de todas las izquierdas, pero sí de la mayoría de ellas.

Todo esto es lo que me mueve a votar, en estas elecciones, a SUMAR y lo cuento, por si algo ayuda…, que estamos en campaña.

 

 

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