Meryl Streep es Premio Princesa de Asturias de las Artes de este año. El premio honra y reconoce a la premiada y la premiada, sin duda alguna, prestigia y honra al premio. Y esta es la vara de medir que, creo debemos tener, para este tipo de instituciones y reconocimientos.
El premio Princesa de Asturias debió seguirse llamando como se denominó al principio de su creación: ”Premio Principado de Asturias”, dado que la fundación que promueve y otorga estos premios se constituyó en 1981, promovida principalmente por el periodista asturiano Graciano García para poner en valor la recuperación, con la democracia y Constitución del 78, de históricas instituciones asturianas, como es el Principado. Al haberse recuperado, con la restauración monárquica, el título de Príncipe de Asturias, la Fundación decidió asumir el nombre, primero, de Príncipe de Asturias y, ahora, Princesa de Asturias que, como se ve son denominaciones coyunturales. En la más o menos próxima República este prestigioso premio con sus galardones podrá y deberá seguir existiendo, solo que con su originaria denominación: Premio Principado de Asturias.
El Premio Principado de Asturias, pues, ha honrado a todos los que han sido galardonados con él. Y la excelencia y excepcional valor cultural, científico, ético, humano, social y político de las personas galardonadas honran a la fundación que gestiona el premio y prestigian al premio mismo.
Meryl Streep es, sin duda la gran actriz de nuestro tiempo, cuando menos. Dúctil, versátil, capaz de todos los registros interpretativos, siempre creíble en la representación de todos sus personajes, tan diversos y distintos: Julia, la Dama de Hierro, Sophie, Miranda Prestly, Donna Sheridan, Francesca, Joanna Kramer y un largo etc. Rigurosa hasta el extremo, fiel al personaje hasta en el acento, siempre genial y dotada de una inteligencia interpretativa y de un talento excepcional. No es Meryl Streep guapa canónica, ni falta que hace, porque es una mujer bella, muy bella, capaz de comunicarse, de empatizar y de transmitir sentimientos y valores de equidad, libertad y dignidad. Valiosa y bella.
Merece que el prestigioso premio de Principado de Asturias la galardone y reconozca y, sin duda ninguna, Meryl Streep prestigia el premio que recibe.